Ganador del prestigioso “Deutscher Spiele preis Best Children’s Game”, en este original juego de mesa, las trampas no solo no están prohibidas, sino que probablemente estarás obligado a hacerlas para ganar.
Cada jugador recibe una mano de ocho cartas y gana el primero que consigue deshacerse de ellas. Por desgracia, algunas de ellas no pueden descartarse de forma normal y los jugadores deben buscar sistemas alternativos para librarse de ellas.
Raquel Prieto Ruiz –
Fácil de aprender a jugar, partidas rápidas y muchas risas, salvo que te toque ser el chinche guardián 😅😅😅